Nemomarlin amplía su presencia en Barcelona

La marea de Nemo inunda Barcelona. Y es que la ciudad condal recibe con los brazos abiertos a la nueva Escuela Infantil Nemomarlin (http://www.escuelanemomarlin.com) en la zona de Turó Park. Marta Fernández es la nueva franquiciada que acerca a los pequeños barceloneses la oportunidad de una educación infantil de calidad y en la que el desarrollo de los niños es el principal motor. “Estoy encantada de afrontar este reto. Soy consciente de que es un sector muy exigente, pero también sé que gracias a Nemomarlin tengo las mejores herramientas para hacer que mi proyecto sea un éxito”, comenta la franquiciada.

Así las cosas, el nuevo centro de Barcelona se encuentra situado en la Calle Johann Sebastian Bach nº 10-12 y consta de 980 m2 en los que los niños estarán atendidos por 15 personas. “La mejor carta de presentación con la que contamos es la continua preocupación por innovar, la búsqueda de métodos para mejorar día a día el aprendizaje y la preocupación por la salud y el bienestar de todos nuestros alumnos”, explica Marta Fernández. “Sabemos que lo más importante para los padres es la seguridad de sus hijos, saber que están en buenas manos el tiempo que no están con ellos y esa es una garantía que nosotros les damos desde el primer momento”.

Hasta el más mínimo detalle
Para Nemomarlin la educación empieza desde el primer momento en el que un alumno entra en la escuela. Es por ello que ofrece una serie de actividades y servicios que no son comunes en el sector. “El hecho de que los niños puedan aprender inglés desde los cuatro meses o que se les haga un seguimiento continuo para comprobar malas posturas son características diferenciadoras que para los padres suponen un plus muy importante desde el principio”, analiza la franquiciada.

Futuro lleno de luz

Con esta nueva apertura, Nemomarlin continúa su aventura catalana y sigue cumpliendo las expectativas de expansión marcadas. “Los emprendedores están apostando por nosotros, confiando en nuestro modelo de negocio y ayudando a que llegue al máximo número de familias”, subraya Héctor Díaz Reimóndez, Consejero Delegado de la red de escuelas infantiles.

Para la enseña, sus franquiciados son uno de sus mayores activos. “Es también gracias a ellos que nuestro proyecto crece. Nosotros tenemos una serie de ideas y las desarrollamos; pero hay un feedback continuo con ellos que nos ayuda a saber si vamos por el camino correcto y a saber de primera mano cuáles pueden ser otras necesidades que puedan surgir”, finaliza el directivo