Financiación en franquicias: que la falta de inversión no te impida desarrollar tu proyecto

La responsable de Topfranquicias.es, Marta González, expone cómo afrontar un nuevo proyecto con capital propio o financiación ajena

Enero de 2017. A la hora de desarrollar un proyecto te planteas una serie de costes y, entre ellos, hacer frente a la inversión inicial, que se define como la cantidad económica total que se debe afrontar para montar una franquicia. Esta inversión inicial la podemos afrontar con capital propio o con financiación ajena. Esta financiación ajena puede conformarse con préstamos, créditos, pólizas de créditos… Pero estas opciones, en numerosas ocasiones, quedan excluidas por falta de aval, por deudas pendientes o por estar incluido en listas de morosos. De ahí que aparezcan otras fórmulas para conseguir financiación en franquicia, tales como las sociedades de garantías recíprocas, otros fondos para buscar financiación como capital bancario o capital privado.

Ante la petición de capital es necesario contemplar todos los gastos que debemos abonar. Los más habituales son los siguientes:

  • El local. Nos pedirán la fianza o incluso aval bancario.
  • La constitución de la sociedad. Debemos considerar el tipo de sociedad a crear y sus costes de puesta en marcha: notarías, impuestos, gestoría, etc. En el caso de los autónomos, hablaríamos de gastos menores.
  • La adecuación del local. Cada local es diferente, así que al contratar un local concreto debemos conocer el presupuesto de la adecuación del mismo.
  • Los elementos necesarios para poner en marcha el local y que no incluya la central de la franquicia. Por ejemplo, los equipos informáticos o maquinaria específica.
  • La formación inicial. Debe calcularse los costes en que va a incurrir el franquiciado al acudir a su formación inicial (hoteles, viajes, dietas, etc..)
  • Los stocks. Se debe evaluar el stock necesario para iniciar el negocio. Esta cantidad puede variar de una ubicación a otra según el potencial de ventas y el ritmo de reposición. A veces, quedarse corto puede ser un “morir de éxito”.
  • La campaña de marketing. Es habitual realizar una campaña publicitaria para presentar el negocio en la zona y acelerar así el ritmo de captación de clientes. Esto conlleva la producción de todo el material de publicidad y merchandaising para la publicidad.
  • Los impuestos. Hay que tener cuidado y prestar atención al IVA. Los presupuestos iniciales y los datos normalmente se presentan sin IVA.
  • Personal. Es necesario contar con el pago a los trabajadores y los seguros si se va a incorporar personal.
  • Fondo de Maniobra. Un fondo que nos permita cubrir los gastos para el comienzo de la actividad durante los primeros meses.
  • Los imprevistos. Siempre surgen imprevistos y debemos contemplarlos previamente.

La inversión planteada por una franquicia es solo una estimación ya que el mismo negocio puesto en marcha en diferentes lugares por diferentes personas planteará un coste distinto. Afrontar este gasto es complicado para un emprendedor, por lo que existen opciones financieras que dan soluciones a la realización de los proyectos.